Esa mañana pasé buscando a Raquel por el hospital. Me dijo dos anécdotas. La primera, que el hermano de la traumatóloga, quien se encuentra en la cama al frente de mi tío, vio salir a la Madre María de San José de la cama de Ismael. Diego, el chamito que está en la cama de “el jose”, se puso pálido y durmió cagao.
El otro cuento fue que mi tío se despertó llorando. Dijo que Toribio, aquel personaje que vivió en casa de mi abuela, que levitaba a la gente y murió ahorcado por desamor, le había caído a patadas. Supongo fue la interpretación del incidente de ayer. Me sentí culpable.
Incluso pensé que soy su reencarnación, lo cual me decepcionaría mucho porqué él era negro.
La culpa es el sentimiento más inútil que existe. Sin embargo –y gracias a una conversación muy bonita que tuve en la mañana- pasé el día de manera muy optimista y alegre. El cuento incluso me impulsó a ir, por pocos minutos, al santuario de la Madre María de San José, a una cuadra de mi oficina.
De adolescente –cuando yo “era” comunista- decía que la religión es el recurso de los cobardes para sentirse protegidos.
Yo dejé de rezar hace años. Para mí, la oración es un proceso de visualización y reflexión, mas que repetir frases que hacen referencia a un líder espiritual que murió hace dos mil años.
Concluí que muy en el fondo mucha gente está peor que yo, tengo el apoyo de personas importantes –como mi jefe- y que en el fondo he disfrutado estas tardes, noches y madrugadas de jodedera con los enfermos del hospital. Y sí, me sentí mejor.
7 de mayo
Raquel habló con el Dr. Guerra –sí, el mismo que escribe social con dos “s”- para plantear el tema de dar el alta a mi tío. Dijo que la tracción había dado éxito y que debe mantenerla por 42 días. Ha evolucionado –dice- de forma increíble y que a lo mejor no hay necesidad de operarlo.
Hablé con Juan Diego al respecto. Mis dudas: Eso mismo le dijeron a “el jose” y se fue pon su pata guindando, es difícil que a los 68 años se regeneren los huesos, la operación depende de la autorización de la anestesiólogo y la neumonólogo y, finalmente, si ya se pidió la pieza por el servicio social ¿qué vamos a hacer con ella cuando nos la entreguen?
El día 42 con la tracción se cumplirá el 7 de mayo.
Al Sr. Breto no lo operaron hoy. Supuestamente el clavo no llegó a tiempo y decidieron operar en su lugar a otra persona. No tiene fecha prevista para su intervención.
En las últimas 24 horas ingresaron en la habitación 2 malandros -Dios escuchó mis súplicas-, uno es drogadicto y tiene un tatuaje en un brazo. El otro tiene muy buen humor, pero es chavista. Ya vendrán mejores cuentos.
Mi tío se puso medio violento conmigo. Yo encontré paciencia para no reaccionar como ayer. A Dios gracias hoy no se sacó la tracción.
Extrañamente nombré mucho a Dios en esta crónica.
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