jueves, 19 de marzo de 2009

Nada que buscar


No quería referirme al Clásico Mundial, porque en lo particular todavía estoy muy molesto con la designación de Luís Sojo como manager, y la verdad ya debí haberlo superado.
Pero debo reconocer que a excepción del primer juego contra los norteamericanos, ha dirigido al equipo a lo “Buddy” Bailey, ya que no le ha temblado el pulso al momento de cambiar a los lanzadores. Ya ni recuerdo a aquel Luís Sojo que permitió que la selección cubana le hiciera 5 carreras a su compadre Giovanni Carrara, o que metió en el róster al “Potro” Álvarez, Robert Pérez y a “Tomasito” Pérez, excluyendo a Luís Rodríguez, Ronny Cedeño y Alex Cabrera, entre otros.
Pero quiero referirme al béisbol japonés. Al momento del primer Clásico, no tenía blog, y por tanto no tengo prueba alguna que en su momento di a Corea y a Japón de favoritos. En honor a la verdad, nunca di a los cubanos de finalistas. Pero así fue.
El béisbol japonés tiene el mismo nivel del norteamericano, con la diferencia que hay menos extranjeros. Los peloteros nos hacen recordar en su bateo a “Vitico” Davalillo, porque controlan su swing y tienen mucho contacto. Su fildeo no es comparable al de un Omar Vizquel, pero tienen mucha disciplina –como característica de su cultura- y tal vez por eso hacen tan pocos errores.
De los coreanos no sé mucho. Sólo sé que le han ganado un poco de juegos a Japón y que son campeones olímpicos, venciendo a los cubanos. De Taiwán que es una pelota muy sucia, manchada por las apuestas, pero eso sí, juegan.
De corazón quisiera equivocarme, o al menos que los resultados de este sábado y domingo se conviertan en argumentos para decir que soy un rolo de loco, pero objetivamente creo que ni el imperio del norte ni los colonizadores de Sudamérica tendrán (emos) vida con los equipos del sol naciente.

No hay comentarios: