El contexto es una parte importante para un cronista. Tanto
así que puede conseguir que una frase o un pensamiento pueda cambiar por
completo su significado.
Generalmente la lluvia es el marco referencial para los
momentos tristes. En más de cien años de cine, son muchas los ejemplos.
Confieso que uno de los mejores días de mi vida -en realidad
noche- ocurrió una madrugada capitalina, luego de un anochecer muy lluvioso.
Una vez mi mamá me dijo “La lluvia se lleva las cosas malas”
y esa tarde Caracas escuchó por última vez al mayor manipulador que la ha
gobernado.
Pero en el fondo, la lluvia significa lo que sientas en ese
momento. Es solo un contexto que te hace interpretar lo que tú creas,
dependiendo de lo que tú sientas en ese momento.
Hoy la lluvia de nuevo me ha hecho sentir profundamente
triste. Solo quiero decir eso.
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