Desde el día que la presidenta del CNE dio aquella confusa
declaración, cuando aseguró que el mismo Ente Electoral que organizó una
elección presidencial 40 días posteriores al anuncio de la muerte de Hugo
Chávez, no podría realizar un Referendo Revocatorio este año por “respetar los
lapsos”, la convocatoria a una marcha para el primero de septiembre sonaba
alejada e inoportuna, más aun cuando según el mismo cronograma impuesto por el
poder público, debieron dar la fecha de la recolección del 20% el viernes de la
semana pasada.
Pero este clima de suspenso ha llenado de optimismo a los
más escépticos, y de temor a quienes juran y perjuran tener de su lado a la
gente armada (Militares y choros) de este país. Hoy leí que el clérigo Lenín
Bastidas, quien partió caminando hacia la capital desde un pueblo de Anzoátegui
para asistir a “La Toma de Caracas”, ha motivado a más gente que los dos años
de prisión de Leopoldo López.
Por eso estoy dispuesto a lanzarme un coñazo al estilo de
Adriana Azzi, cuando predijo que Brasil ganaría la final del mundial del 98 a
Francia, o Reinaldo Dosantos con sus 5 sellos. Voy a predecir lo que va a
ocurrir en Caracas este jueves.
Pero como yo sé que la Astrología marca tendencias y no
realidades, escribiré sobre los escenarios que, a 3 días del evento, me parecen
los más probables.
1-
La marcha será un fracaso: La gente “se caga” o
el gobierno logra controlar los accesos a Caracas. Creo que es el escenario
menos probable, ya que el 18% del país vive en la capital. Con que asista 1 de
cada 6 caraqueños tendríamos el millón de personas en la calle.
2-
El gobierno logra desmovilizar a la MUD: La
semana pasada hablé con un dirigente regional de la MUD y le plantee qué pasaría
si antes de la marcha anuncian la fecha de las elecciones regionales. Me dijo
que él saldría corriendo a inscribirse en las primarias. De hecho, me comentó
que el CNE maneja 3 cronogramas y el último coloca las elecciones de
gobernadores para la segunda semana de diciembre.
3-
La marcha es un éxito y todo termina
pacíficamente: Este escenario desmotiva a mucha gente, ya que la mayoría de las
personas que no quiere asistir a la concentración acusa a la MUD de convocar a otra
“Bailoterapia”. La MUD no tiene, al menos en su organización, un Plan B y como
escuché un comentario por allí “El gobierno tiene que entender que la MUD le
está salvando el culo, canalizando la salida por la vía electoral”.
4-
El evento se le sale de las manos a la MUD:
Quiero hacer énfasis en este escenario, ya que hay muchas personas que quieren
ir a Caracas a buscar peo (o sacar a coñazos de Miraflores a Maduro si no
encuentran mayor resistencia) así Chúo Torrealba y Capriles les digan que la
violencia es el camino. He llegado a escuchar “Si igual me va a matar un malandro
para quitarme el celular o me voy a morir porque no consigo medicina, prefiero
inmolarme en Miraflores, pero sacando a estos hijos de puta”.
¿Está el PSUV provocando este escenario? Venezuela
no es la misma de 2002, no solo porque Chávez está muerto, sino porque los
sectores populares odian a Maduro, lo consideran único responsable de sus
carencias en la alimentación, creen que la Guerra Económica no existe y que el
gobierno no tiene cabeza para arreglar este peo.
Los militares no tienen la mayor aprobación
de la gente y los soldados rasos están pasando hambre en los cuarteles.
Los colectivos podrán estar armados, pero son
unos pajúos al lado de los “Trenes”, quienes se dice tienen culebras con
algunos gobernadores del PSUV por deudas en dólares.
Es decir, buscar un nuevo 11 de abril para
victimizarse ante la opinión pública, cuando estás matando de hambre al pueblo,
sin credibilidad nacional e internacional, sin una “Misión” que enamore, sin el
control de todos los sectores armados del país y con Chávez muerto, va más allá
de lo suicida.
Y concluyo: El estado ha jugado al
Bulliying y al descaro por mucho tiempo y en los escenarios de anarquía, todos
pierden.
Repito, no soy brujo ni tampoco he revisado si Mercurio está
retrógrado, pero sí quisiera citar a Fernando Soto Rojas, dirigente comunista,
quien al ser consultado sobre la afirmación de Ramos Allup de “Terminar con el
gobierno de Maduro en 6 meses”, aseguró que los procesos sociales no tienen
tiempos.
No sé si se prenderá un peo, pero hay sensación de coñaza en
el ambiente. El Caracazo ocurrió más de 10 días después del anuncio del
paquetazo “Neoliberal” de Carlos Andrés Pérez.
Lo que comenzó siendo una nueva convocatoria a Bailoterapia,
se ha transformado con el pasar de los días en la metamorfosis del opositor
venezolano, quien ya parece entender que el revocatorio no es una bandera
política de Capriles, López o María Corina, sino la forma más inmediata para
que nuestro país vuelva a ser una tierra de oportunidades.
Por fin el opositor a Maduro entiende que el güebón no es el
líder que salió a recoger las firmas para que un organismo electoral se “haga
el loco”, el güebón es quien elige un liderazgo para que le ofrezca un cambio y
lo deja solo.
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