Yo tengo un amigo llamado “Calabozo Dundie”. Su apodo se lo colocamos cuando llegó a estudiar bachillerato a Maracay. Venía remitido de un liceo de esa población guariqueña, y lo de “Dundie” se lo colocamos por lo fantástico de sus cuentos, sobre todo por sus “hazañas sexuales” a tan temprana edad.
Sus embustes empezaron a confirmarse poco a poco. El primero fue un cuento sobre un Jeep “Willi”, el cual supuestamente le partió el “carter” –así se escribe- rustiqueando. Pues el Jeep se dañó porque se lo prestó a una chamita del cual él estuvo enamorado toda la vida, intentó enseñarla a manejar y ella chocó.
Hubo un chiste sobre él en el colegio. En una situación imaginaria, nuestro profesor de Geografía nos preguntaba: ¿Dónde queda Calabozo? Y respondíamos “No sabemos profesor, pero “Dundie” ha tirado que jode ahí. La otra: ¿Cuánto es la población de Calabozo? Pues preguntemos a “Dundie cuántos polvos ha echado y lo multiplicamos por 2.
Años después yo estudiaba comunicación en la universidad. En una época, el estaba empatado con una amiga y tuvo un cable pelado con la otra. Al final ellas se vengaron y se hicieron muy amigas.
Sobre el cuento hubo al menos 6 versiones. Ciertamente no le creímos al pana de buenas a primeras, pero luego de un trabajo de investigación con 6 personas relacionadas al cuento, decidí publicar un resumen.
Versión 1: Me las pegué a las 2. Las dos son malos polvos. A la que fue mi novia la enseñé a tirar. Son unas mierdas de personas.
Versión 2: Fuimos novios. Él tenía un cable pelao con mi amiga y nos vengamos.
Versión 3: Él y yo nunca tiramos. Nos vengamos y ahora somos muy amigas.
Versión 4: Se las pegó a las 2. Ellas le hicieron una ratada digna de par de putas.
Versión 5: Se las pegó a las 2. Ellas se vengaron en un viaje a Calabozo. Inicialmente ellas decían estar despechadas por él y hasta cantaron una canción de Ana Gabriel, creo que se llama “Amiga Mía”, para que se sintiera orgulloso que dos mujeres se morían por él. Luego aparecieron dos primitos de la versión 4, los cuales se las pegaron a las 2. Una de ellas dijo "Este chamito tiene 15 -o 17- y tira mejor que “Dundie”.
Versión 6: No me consta que se haya pegado a la del “cable pelado”, pero dejo la posibilidad abierta. Con respecto al viaje a Calabozo, pues coloca el cuento que te echó “Versión 5”, porque no me sentiría bien conmigo mismo corroborando esa historia.
Mis conclusiones.
Ciertamente yo no fui a ese viaje y sigo siendo amigo –al menos antes de echar este cuento por internet- de 5 de los 6 mencionados. Aquí mis juicios de valor, donde sin duda lanzo la primera piedra.
1- Si bien “Dundie” quedó mal parado como caballero y como hombre, en 4 de las 6 versiones él se las pegó a las 2.
2- Su ex se vengó como Dios manda. La admiro por eso.
3- La del cable pelao es una pobre guevona que le da pena admitir que un tipo tan feo como Dundie se la raspó, y vaya que ella está lejos de ser la más buena que haya pasado por sus historias –comprobadas- de sexo. Lo más cumbre es que ella lo odia por habla paja, cuando casi todos los allegados afirman, o al menos dejan la posibilidad, que entre ellos dos pasó algo.
Yo pensé que ese tipo de actitudes eran dignas de cuentos de bachillerato. Gracias a Dios no protagonicé ese peo.
domingo, 13 de septiembre de 2009
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